La Chevrolet S10 incorpora el Filtro de Partículas Diesel

A partir de marzo de 2018, General Motors Argentina comercializará los modelos Chevrolet S10 y Trailblazer con el Filtro de Particulas Diesel (DPF) en todas sus versiones. De este modo, la motorización de 2.8 litros de 200 CV cumplirá con la norma medioambiental Euro V, la cual es obligatoria para nuestro país desde enero de 2018.

La norma Euro V tiene como objetivo reducir las emisiones de gases y partículas contaminantes en vehículos dotados con motores de combustión interna.

Los gases que eliminan los motores luego de la combustión, antes de salir por el escape, pasan por un catalizador que sirve para convertir los que son nocivos para el ser humano (monóxido de carbono u óxidos nitrosos) en inocuos, como dióxido de carbono o vapor de agua. Pero los gases de escape de los motores diésel, además, llevan consigo muchas partículas de hollín, carbono impuro resultante de la combustión incompleta del gasoil. Ese hollín, es muy perjudicial para la salud, por lo que motivo es preciso filtrarlo.

Para reducir el nivel de emisiones contaminantes se coloca en el sistema de escape el mencionado dispositivo DPF. El mismo se ubica entre el catalizador, por un lado, y el silenciador y la boca de escape, por otro. Cuando este filtro acumula una determinada cantidad de partículas sólidas, se regenera al quemar el hollín residual en forma de ceniza. Este proceso se puede producir automáticamente y sin que el conductor se entere. Si el filtro se satura, el sistema le indicará que debe seguir la marcha bajo determinadas condiciones (en general es a más de 30 km/h en un lapso de entre 10 y 15 minutos).

En caso de que el usuario no respete esta indicación, el motor comenzará a funcionar en modo de emergencia, y el vehículo deberá ser trasladado a un concesionario para regenerar el filtro. Es importante destacar que si el filtro se obstruye en su totalidad, los gases del motor no podrán salir y el mismo se romperá.